¿Qué ocurre si la tensión de la cuerda es demasiado alta o demasiado baja?

Aplicar la tensión equivocada a las cuerdas puede provocar una sobrecarga o una falta de tensión. Una falta de tensión provocará una pérdida de sonido, mientras que una sobrecarga puede causar daños permanentes en el instrumento.

Falta de tensión
Si las cuerdas tienen un sonido más bien nasal o muy metálico, puede deberse a que el instrumento esté poco tensado; esto significa que la presión que se está aplicando sobre la tapa armónica es insuficiente. Una cuerda insuficientemente tensada puede notarse más dura al contacto con los dedos. ¿Por qué? En términos físicos, el origen está en las numerosas reflexiones de vibraciones que se producen en el puente y que son devueltas a la cuerda. 

Sobrecarga
Cuando se produce una sobrecarga, el instrumento reacciona inmediatamente: la mayoría de las veces, el sonido es oscuro y amplio. El brillo y el timbre pueden verse silenciados de manera notable, mientras que, con el paso del tiempo, el instrumento pierde necesarios sobretonos y parte de su sonido metálico. A menudo, el sonido resultante es hueco y recuerda al de una trompeta. La sobrecarga también afecta a la vida útil tonal de un set de cuerdas, que seguirá acortándose en cada nuevo set que se monte en el instrumento y al que se aplique la misma tensión. Al contacto con los dedos, las cuerdas también tienden a sentirse más suaves. 

Al contrario que cuando el problema es la falta de tensión, la sobrecarga sí puede provocar daños permanentes en los instrumentos. Principalmente, la tapa armónica puede presentar dos comportamientos a los que debe prestarse atención: 

  • La sobrecarga puede hacer que la tapa armónica se comporte de manera ortotrópica y viscoelástica lineal. Una sobrecarga ligera puede hacer que la caja armónica se hunda, pero podrá recuperarse completamente y corregir dicho comportamiento.
  • El problema es grave cuando se da una sobrecarga de comportamiento ortotrópico viscoelástico no lineal. En este caso, el instrumento sufre una sobrecarga excesiva que puede hundir la tapa armónica de forma irreversible.

En ambos casos, una posible solución será reducir temporalmente la tensión del instrumento; esta medida puede tener que aplicarse hasta seis meses. Le recomendamos que use cuerdas con menor tensión que permitan a la tapa armónica del instrumento recuperar su forma anterior, lo que hará posible que el sonido vuelva a ser el ideal. Al principio, es frecuente que el sonido resultante sea algo más nasal y claro, ya que, como hemos dicho antes, al instrumento le falta tensión. No obstante, siempre que las cuerdas se hayan tensado correctamente, este fenómeno acústico terminará por desaparecer. Es importante tener paciencia. Sin embargo, si la tensión incorrecta y excesiva de las cuerdas no se corrige, usted estará causándole un daño irreparable al cuerpo del instrumento. 

Le recomendamos por tanto que consulte a un experto, ya que cada instrumento es diferente y el proceso de rehabilitación puede ser largo. 

 

 REGRESA

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